UN DOMINGO NORMAL

Es un domingo normal, me levanto y me meto a bañar, al salir comienzo a sentir una especie de punzadas en todo el cuerpo y me digo "ha de ser enfriamento" porque siempre tengo la costumbre de destaparme la espalda cuando duermo y lo atribui a eso, pero de repente senti la cara como extraña, mi parpado izquierdo estaba como cerrado y sentia ese lado dormido y me espante, rápido fui con mis hermanos y les dije que no me sentia muy bien y pensamos que era paralisis facial, mis papás se comunicarón con nosotros por teléfono como cada domingo y le conte a mi papá, me dijo que me tranquilizara y que fuera a ver al Dr. Manuel (médico de cabezera de la familia desde hace muchos años), mi padre atribuia esa paralisis al stress del trabajo, problemas económicos y una depresión amorosa por la cual habia pasado dos meses antes, también hable con mi madre y me dijo que no me asustara, que todo iba a estar bien, acto seguido fuimos a ver al Dr. Manuel pero ya sentia las piernas pesadas y se me dificultaba caminar por lo cual mi hermano César me detenia mientras caminabamos a la casa del Dr. en compañia también de mi hermano Alejandro, me fue tambien muy dificil subir las escaleras, el Dr. ya me esperaba y me observaba, por fin logre subir todos los escalones y me reviso, me dijo que si era una especie de paralisis facial lo que tenia en la cara pero no se explicaba el porque de la debilidad de las piernas, el Dr. tomo su directorio telefónico y llamo a uno de sus colegas que es neurologo y me dijo que me iba a canalizar con él y por lo pronto me receto unas tabletas no recuerdo para qué ni el nombre, que comiera algo ligero como caldo de pollo; fuimos a comprar las cosas y mientras César iba a comprar todo yo me cominique con Tania mi compañera de trabajo y le conté lo que me estaba pasando, me dijo que descansara y que no me preocupara por el trabajo, que ella le avisaba a Anita mi jefa, también le llame a Raziel otro compañero de trabajo y de igual manera me brindo su apoyo, regresamos a la casa y me sentia cada vez más débil de las piernas, me recosté mientras mi hermano Alex me preparaba el caldo de pollo y arroz, cuando me sirvio de comer ya los brazos me pesaban un poco y comi con dificultad, me recosté de nuevoi en mi cuarto y llego a la casa mi cuñada Cinthya, novia de mi hermano César y me pregunto como me sentia y le dije que cada vez peor al querer levantarme de la cama ya no me respondieron las piernas y se me doblarón, se asustarón y César le llamo de nuevo al Dr. Manuel para pedirle los datos del Neurologo, me llevaron al hospital Betania que es uno de los mejores hospitales de Puebla ya que ahi localizariamos al Neurologo, me llevaron a urgencias y me comenzarón a hacer preguntas y localizaron al Dr. pero pidio que me llevaran al ISSTE porque él se encontraba allá, pero optamos por ir mejor a mi clínica del seguro social y ahi me recibio Luz María una enfermera amiga de la familia, se porto muy comprensiva conmigo y me dio ánimos, luego llego el Dr. Soto para hacerme las preguntas de rutina y dar un posible diagnóstico para canalizarme a la clínica de San Alejandro.